Ya te ha orientado bien Yeni. Hay que tener constancia y paciencia para corregir esos "malos modos" como cuando educas niños pequeños.
A mi me resultaba bien decirlo "NO" de manera rotunda y exagerar el dolor cuando me mordia. Y ya no la levantaba en brazos ni le daba mimos. También uspe la técnica del chistido (llegue a parecer una lechuza de tantos "Chist-chist"
Y además detenía el juego cuando notaba que mordia fuerte. Tiene que aprender que nadie jugara con ella si muerde.
Tu peque es sumamente dominante
, lo que te vendría bien es hacerle notar que la "dominante" eres tú... ponla de espaldas sobre el piso sosteniéndole por el pecho aunque patalee y aunque intente levantarse no se lo permitas. Hay que mantenerlos en esa posición "expuesta" (acostados sobre sus espalditas) hasta que deje de patalear e intentar incorporarse. Cuando se rinda y se quede quietecita, ya la puedes soltar. Eso es lo que hacen entre si los perros que dominan la manada. Muestran su "poder" sometiendo al que les hace frente.
Estas consignas para que resulten tienen que ser repetitivas.. o sea en cada ocasión tienes que decirle "NO", puedes reforzar con el chistido (o cualquier ruido seco y cortante) Y el método de ponerla de espaldas hasta que se calme.
Nada tendrá resultado inmediato... pero si eres constante lograras marcarle que ella no manda en tu casa ni en los juguetes.