Retencion de orina en perros (RETENCIóN URINARIA FUNCIONAL )
Retención urinaria es el término médico dado a un
vaciamiento (o micción)
incompleto de la orina que no está asociado con obstrucción de las vías urinarias, mientras que "funcional" se define como siendo causado por un problema con la acción normal de un órgano.
Las complicaciones derivadas de la retención urinaria funcional pueden provenir de una infección del tracto urinario inferior, que asciende hacia la vejiga; la ruptura de la vejiga urinaria o uretra; y lesiones permanentes y atonía (debilidad / pérdida de coordinación) del músculo detrusor, la capa muscular de la pared de la vejiga urinaria, que se contrae, empuja hacia abajo el contenido de la vejiga, y hace que la orina salga del cuerpo a través de la uretra.
Esta condición es más frecuente en machos que en hembras.
SÍNTOMASVejiga distendida palpable
Intentos de orinar ineficaces, frecuentes y sin éxito
El flujo de orina puede ser débil, atenuado o interrumpido
La vejiga puede estar tan llena que con frecuencia hay fugas de orina
La distensión abdominal, dolor abdominal o signos de azotemia post-renal pueden predominar en casos raros, o con ruptura del tracto urinario
Las infecciones recurrentes del tracto urinario pueden haber causado problemas musculares asociados con la micción
CAUSAS
Hipercontractilidad del músculo detrusor de la vejiga urinaria (atonía del detrusor)
Más comúnmente se desarrolla después de la sobredistensión vesical repentina (aguda) o a largo plazo (crónica), muchos perros tienen un historial de disfunción del sistema nervioso o bloqueo u obstrucción urinaria previos.
Alteraciones electrolíticas, tales como la hiperpotasemia, hipopotasemia, hipercalcemia, hipocalcemia
Lesiones de los nervios pélvicos
Lesiones de la médula espinal sacral (como malformaciones congénitas, compresión de la cauda equina, enfermedad discal lumbosacra, y fracturas/luxaciones vertebrales) pueden dar lugar a una vejiga flácida, sobredistendida con resistencia de salida débil (la resistencia de salida es la inhibición de la capacidad de orinar a través de la uretra)
Lesiones de la médula espinal suprasacral (como la protrusión del disco intervertebral, fracturas de la columna, y tumores de compresión) pueden resultar en una distensión y firmeza de la vejiga urinaria que es difícil de liberar o vaciar por una presión manual suave
Los perros con neurópatas, lesiones sacras, lesiones suprasacrales de la médula, o trastornos del cerebro medio también pueden sufrir de disinergia detrusor-uretral, donde la contracción del músculo detrusor y la relajación de la uretra no se coordinan
Disminución de la contracción del músculo detrusor (atonía del detrusor), con retención de orina es una característica de un trastorno caracterizado por una función anormal del sistema nervioso autónomo (conocido como disautonomía)
Algunos perros con un nivel excesivo de esteroides producidos por las glándulas suprarrenales (conocida como enfermedad de Cushing) tienen una micción aumentada (poliuria), distensión de la vejiga urinaria y retención urinaria leve
Obstrucción urinaria funcional
Antecedentes de cirugía pélvica o uretral
Medicamentos anticolinérgicos (que pueden afectar a las acciones nerviosas normales)
Excesiva resistencia uretral que suele atribuirse a los componentes del músculo liso o estriado de la uretra (uretroespasmo) puede ser vista después de una obstrucción uretral o cirugía uretral o pélvica, inflamación de la uretra, o enfermedad de la próstata
DIAGNÓSTICOUsted tendrá que darle a su veterinario un historial completo de la salud de su perro, el inicio de los síntomas y los posibles incidentes que podrían haber llevado a esta condición. Un perfil completo de sangre se llevará a cabo, incluyendo un perfil bioquímico de sangre, un hemograma completo y un análisis de orina. El análisis de orina puede revelar la evidencia de una infección o inflamación del tracto urinario.
Un examen neurológico incluirá una breve evaluación de la columna lumbar, caudal.La función de los nervios periféricos será evaluada por la exploración del tono anal, el tono de la cola, y los reflejos perineales (el músculo que está entre la abertura anal y uretral). La cateterización uretral puede ser necesaria para descartar una obstrucción uretral. Si no hay obstrucción la sonda debe pasar fácilmente a través de la uretra.
Una mielografía, una epidurografía, o una tomografía computarizada (TC) pueden ser usadas para determinar si las lesiones están presentes en la columna vertebral, lo que indicará una causa neurológica. Otra técnica de imagen que los veterinarios utilizan consiste en inyectar un agente radiocontraste en el cuerpo del perro para seguir el curso de la orina desde los riñones a través del tracto uretral por radiografías.
Debido a que hay varias causas posibles para esta condición, su veterinario utilizará el diagnóstico diferencial más probable para resolver la causa subyacente. Este proceso es guiado por una inspección más profunda de los síntomas externos evidentes, descartando cada una de las causas más comunes hasta que el trastorno correcto sea determinado y pueda ser tratado adecuadamente.
Aquí están algunas de las posibles causas que se tendrán en cuenta y, o bien serán descartadas o confirmadas:
*Compresión extramural de la uretra, como por una masa blanda en el cuello de la vejiga, una próstata grande, o una masa abdominal caudal
*Oliguria, anuria, y la ruptura del tracto urinario
*Obstrucción física y mecánica, los signos clínicos de obstrucción urinaria incluyen polaquiuria, estranguria y hematuria, los pacientes con obstrucción mecánica pueden liberar algunas gotas de orina después de largos períodos de esfuerzo
*Lesiones por encima de la espina dorsal o en el sacro (la base posterior de la columna vertebral) que pueden afectar a las señales del cerebro y por lo tanto la necesidad de orinar, también pueden ser indicadas por una parálisis parcial o completa de las extremidades, hiperreflexia de las extremidades, y el dolor cervical, toracolumbar y lumbar, tono de la cola deprimido;
*La vejiga urinaria suele estar distendida, firme y difícil de vaciar con lesiones de la espina dorsal superior, y normalmente está distendida, flácida, y bastante fácil de vaciar con lesiones sacras, en pacientes con lesiones crónicas o parciales, el vaciado reflejo de la vejiga puede volver
*Pérdida de coordinación muscular en el músculo detrusor
En pacientes que se recuperan de una obstrucción urinaria, la dificultad para orinar puede ser consecuencia de una re-obstrucción, de una resistencia uretral excesiva(obstrucción funcional), o la debilidad (atonía) del detrusor causada por la sobredistensión; si la vejiga urinaria se puede vaciar a través de una compresión manual suave aplicada en el abdomen , la atonía del detrusor es probable; si hay una resistencia al vaciamiento manual y la obstrucción de la uretra se puede descartar mediante un examen o una cateterización, una obstrucción funcional es probable
TRATAMIENTOA menos que exista una condición subyacente grave que esté causando este trastorno urinario, su perro probablemente será hospitalizado hasta que recobre la funcionalidad urinaria. La infección del tracto urinario, si esta presente, será identificada específicamente y tratada adecuadamente. Su veterinario indicará los desordenes principales, tales como alteraciones de los electrolitos y lesiones neurológicas y las corregirá si es posible. La azotemia, el desequilibrio de electrolitos y las alteraciones ácido-base asociados con la retención aguda de orina se manejarán adecuadamente. Su médico también controlará los niveles de exceso de urea y otros productos de desecho nitrogenados en la sangre (uremia o azotemia), desequilibrio de electrolitos y alteraciones ácido-base asociados con la retención de la orina repentina (aguda)
En algunos casos, la micción completa no retorna, en este caso su perro requerirá cuidados de salud urinaria de por vida. La compresión manual con frecuencia será necesaria para la liberación de orina y el sondaje vesical intermitente o permanente puede ser necesario para asegurar el flujo de orina y mantener la vejiga pequeña.
Su veterinario llevará a cabo análisis de orina periódicos para detectar la infección del tracto urinario si su perro ha sido diagnosticado con una retención crónica de orina.
